Irma, nuestra voluntaria desde Dolo (Italia)

SALUDOS A TODXS!!!!

¿Cómo os va? A mí la verdad es que bastante bien, llevo ya casi 5 meses en Dolo (Venecia, Italia) haciendo mi SVE y puedo deciros que está siendo de las mejores experiencias de mi vida (junto con el Erasmus que hice).

Me está gustando tanto esto, que estoy pensando en quedarme a vivir por aquí un tiempo después de terminar mi SVE... ¿qué por qué me está gustando tanto? Os explico.

Primero porque viajar, conocer gente nueva y lugares diferentes siempre te abre muchísimo la mente, y te hace crecer como persona de una manera que no os podéis ni imaginar, y el SVE te da la magnífica oportunidad de hacer todo esto, además de adquirir experiencia profesional en un campo de trabajo que te gusta, te lo dan en bandeja vaya.

Segundo, porque Venecia es la mejor ciudad del mundo a mi parecer, me tiene enamorada, y el italiano es el idioma más bonito que he conocido hasta ahora.

Tercero porque estoy conociendo a gente maravillosa que está haciéndose un hueco importante en mi vida, que me hacen sonreír en los momentos difíciles y ríen conmigo en los felices.

Y por último porque adoro este voluntariado, para mi trabajar aquí es como un hobby, lo hago gustosa, me encanta.

¿Qué en qué trabajo? Pues estoy en una asociación llamada “Il Portico”, que realiza actividades con personas en dificultad social y marginación, ya sea por problemas psíquicos o físicos, además hospeda a ciertas personas que no tienen donde ir o tienen problemas, hasta que pueden valerse por sí mismos y vivir de manera independiente.

Hacemos talleres, excursiones, juegos... yo me encargo de la parte del diseño gráfico (tipo si se debe hacer un cartel para promocionar algo) y de las fotos. Además estoy recibiendo un curso de italiano online y otro en una escuela, y clases de conversación, con lo cuál estoy aprendiendo muchísimo italiano.

A todo esto hay que sumarle que estoy viajando muchísimo y muy económico, recientemente he estado en Nápoles en una formación (los SVE tenemos a lo largo del proyecto formaciones en las cuáles te orientan en el voluntariado, te dicen para qué puede servirte luego...), y en la montaña nevada, porque donde trabajo hacen una excursión en invierno a la nieve. También he estado en Roma, Milán y Florencia, en fin, una pasada.

En suma, animo a todxs a realizar una experiencia de este tipo, no os lo penséis más porque no os vais a arrepentir, y vais a volver a casa (si es que volvéis) felices, crecidos y con muchas más ganas de hacer cosas que cuando os fuisteis.

Con dos de los huéspedes que viven conmigo en la casa de acogida, Marco y Fede

Fin de semana en la nieve, excursión para gente con dificultad

Junto a otro huésped de la casa

Junto a otras voluntarias, comida de año nuevo

En Pompeya, un sitio precioso

Mi casa, el albergue en el que vivimos Elise, yo y 9 huéspedes (los demás vienen solo a hacer actividades y luego van a casa, y los que trabajan aquí vienen todos los días pero no viven aquí)

Junto a la otra voluntaria europea, Elise (Francia)

El puente de los suspiros con niebla, no os imagináis la niebla que hace aquí, es increíble, hay días que no se ve nada!